¿Qué pasará con la guerra de aranceles entre China y EE.UU?

La reciente reunión mantenida entre Xi Jinping y Donald Trump logró la firma de un acuerdo que satisface a ambas partes, y que tendrá que llevarse a la práctica en los próximos 90 días.

Trump acordó que no habrá cambios en los aranceles sobre las importaciones chinas por un valor de 200.000 millones que se mantendrán en una tasa del 10%, de forma que “por ahora” no llevará a cabo sus planes de incrementarlas al 25%.

En el caso de China, Xi se ha comprometido a comprar una cantidad muy relevante de productos agrícolas, energéticos, industriales y otros productos de Estados Unidos para reducir el desequilibrio comercial entre nuestros dos países.

Por otra parte, también se han incluido en el acuerdo el inicio de conversaciones sobre apartados muy relevantes como la protección de la propiedad intelectual, las transferencias de tecnología forzadas, las barreras no arancelarias, así como en el campo de la ciberseguridad.

Las condiciones del pacto entre los dos dirigentes implican que si no se cumplen las condiciones en los próximos 90 días, se producirá el temido aumento de aranceles, algo que no conviene a ninguna de la partes.

Lo cierto es que aunque Trump apuesta por una política proteccionista de su economía, a día de hoy parece que un enfrentamiento con China conllevaría más desventajas que ventajas para las empresas estadounidenses, ya que muchas de ellas producen sus productos en el gigante asiático.

Habrá que ver cómo evoluciona la situación, pero no cabe duda de que es altamente positivo que se haya logrado un acuerdo que permita calmar las aguas, al menos de momento.